Sin lugar a dudas el término calidad se hace imprescindible en todas las organizaciones para que, fundamentalmente, los productos que ofrecen tengan una gran aceptación y éxito. Lograr esto último se hace bastante difícil y por ello las empresas (de cualquier ámbito: social, escolar, empresarial) deben llevar a cabo una evaluación de calidad de las mismas.

 

En asignaturas como Evaluación de programas, centros y profesores es esencial hablar de calidad, ya que todo se rige en la vida por la calidad. Si algo posee calidad, seguro será algo que perdure en el tiempo, ya que a los clientes les gustará y llegarán a confiar en el producto, más que en los de la competencia; y es este último paso, el que persiguen las grandes empresas. Ser líderes de su mercado.

 

Dentro de la calidad, posiblemente en lo primero que pensamos es en el precio del producto o servicio que vamos a necesitar. Sin embargo, esto no siempre es correcto. No por ser caro tiene que ser de calidad y viceversa.
 

Existen una serie de características que hacen que una empresa (ya no solo su producto estrella) tenga calidad, como puede ser: que sobrevive en el tiempo, que busca la excelencia, que es responsable hacia la sociedad... Pero fundamentalmente es importante tener en cuenta que aquella organización será más que excelente cuando este bien orientada hacia el cliente, ya que es este el que decidirá si algo es o no de calidad en función de sus necesidades y/o expectativas. 

 

La implementación de programas de administración de la calidad, permiten alcanzar beneficios significativos, tales como un incremento en la eficiencia, reducción de costos y mayor satisfacción de los clientes, todo orientado a mejorar los resultados de los negocios.

Concretamente La Función Europea para la Gestión de la Calidad (EFQM) tiene un rol clave en la mejora de la efectividad y la eficiencia de las organizaciones europeas al reforzar la importancia de la calidad en todos los aspectos de sus actividades.